jueves, 29 de diciembre de 2011

Photgrap-Jamie Cullum


Abrir la caja de esa vieja colonia, esa con las pocas fotos que no rompí.



Her name was written on a photograph,
right next to her red, sunburnt face,
it all had happened in that long tall grass,
about a mile from her old place,
and I can't remember how it started and if it lasted that day in the sun.

We said that we were going to study hard,
we held our books instead of hands,
she held a blanket over cans of beer,
I can't deny I was so full of fear.

It's just another story caught up in another photograph I found.
and it seems like another person lived that life a great many years ago from


 

martes, 27 de diciembre de 2011

Como diría un compañero de la Santa Casa, no me gusta cómo se le está poniendo el ojo a la yegua. Y con esta expresión, me refiero al blog.

Me salen entradas tristes porque, cuando no estoy (o no se está, para hablar en genérico) triste no merece la pena escribir. Para eso escribo. Para quitarme mierda de la cabeza y que lo lean 3 o 4 personas a las que podría contarles esto mismo que tecleo a la cara. Pero como no se lo diría, se lo escribo.

Tampoco es que sea del todo sincera aquí. Tampoco escribo todo lo que debería escribir para dejar constancia (el no tener Internet en casa hace que la mayoría de los post sean una mierda, sin forma ni fondo. EL no tener tiempo ni ganas, y probablemente miedo de ver a dónde me lleva el cabo de mis pensamientos hace que no me siente encima de la cama a escribir). Hay veces que teclear podría ser como pulsar agujas. Y la sangre me marea.

Después de unas Navidades de espanto (decidme cuál es el fin de unas fiestas que sólo son bonitas durante 8 o 9 años de tu vida...) y esta semana post-navideña-pre-año-nuevo de trabajo en solitario, vendrá una nueva hoja en el calendario con un nuevo número en la cifra del año. Siempre me ha gustado mucho más la Nochevieja que la Navidad, por lo que tiene de estreno, de nueva oportunidad. No sé qué traerá el 2012: a quién me presentará, a quién me raptará. Qué sueños violará o que nuevas ilusiones podrá proporcionarme en esta sucesión de días anodinos y quejumbrosos.

No quiero hacer balances. No ahora. No aquí.

Quiero que veáis, si queréis, un resumen de una parte que puede explicar bien el "blue" que dirían los ingleses que destila estas miles de letras mal juntadas. Dónde me quedé. Qué se siente.

Siento que suene a lamento tonto (odio a los quejicas y sobre todo a los cobardes), pero he compartido el 95% de los pensamientos de esto. Somos un gremio llorica? Puede ser. Pero he visto a los mejores compañeros coger una mochila de años de experiencia y abrirla al borde de un precipicio. He visto a los más inútiles encumbrados y reconocidos, y con cientos de oportunidades inmerecidas. No, no he visto naves ardiendo más allá de Orión, pero creo que para eso momento ya me queda poco. Suscribo este video. Suscribo ese hartazgo. Y sobre todo, la falta de poesía.

Sobre todo eso.

Y puede que sea lo que más eche de menos.

http://www.youtube.com/watch?v=-HJ7UWkrDTM



...Y encima, hoy cumple años Serrat......