La vida te pone señales en el camino. A veces no las ves, porque, joder, tampoco te las va a poner siempre que tú las pides...pero terminan saliendo.
Esa contestación a destiempo. Esa sonrisa inesperada. Ese libro que no ibas a leerte. Esa canción que te dice alguien. Ese bus que pierdes. Ese plan B.
Y esas piedras, como las que hay en los jardines, grandes pedruscos alfombrando el camino, te guian, para que no te pierdas.
Y todo, todo, en un momento dado, termina adquiriendo un sentido.
-----------------
"El chico de los ruidos", que es uno de esos ángeles que a mi me puso la vida en mi camino, ha publicado una sesión de música hoy. Esta noche.
Cuando parecía que todo se tambaleaba, cuando he borrado al niño burbuja de Facebook. Aparece él con 57 minutos de música.
Y bueno, no lo tengo cerca, pero me haré a la idea de que estamos en aquel bar sin sillas, con cachimbas y te/mojitos.
Y estaré un poco más cerca. Y un poco menos sola. Vaciando el cerebro.
No hay comentarios:
Publicar un comentario